Embolo quiere que su canción siga sonando en Rusia
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Embolo y Suiza se medirán a Suecia en octavos
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La afición helvética ha ideado una canción dedicada al delantero
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Por Alan Schweingruber, con Suiza
¿Nunca se han preguntado quién crea los cánticos de las hinchadas? ¿Lo hacen tal vez las peñas de aficionados en sus encuentros anuales? ¿En el bar tomando algo? ¿O se trata quizás de una responsabilidad que corresponde al hincha más versado en materia musical? La canción dedicada a Breel Embolo empezó a cantarse hace ya unos tres años, y hoy puede decirse que quien la ideó tenía buena mano... o buen oído, para mayor precisión. El cántico, que toma su melodía del tema The Lion Sleeps Tonight, se ha convertido en una parte imprescindible de la banda sonora de los partidos de la selección suiza. De camino al estadio, en los bares, en las gradas... Dondequiera que se encuentre, la afición helvética entona sin cesar la cantinela, que dice así en su versión original: “In der Schwiizer Nati, da ist der Breel daheim…” (En la selección suiza, Breel está como en casa...).
“La selección y Suiza lo son todo para mí. Me vine de Camerún con cinco años y me formé aquí tanto académica como futbolísticamente. Suiza me recibió con los brazos abiertos cuando era solo Breel y me ha convertido en Breel Embolo”, declaró a FIFA.com en su día el internacional helvético, que tiene actualmente 21 años.
Nacido en Camerún, Embolo se mudó a Suiza con su madre y, desde que tenía nueve años, fue pasando por varios clubes de base de la ciudad de Basilea hasta recalar en el FC Basilea, uno de los grandes del fútbol helvético, en 2010, cuando contaba 13 primaveras. El atacante, que milita actualmente en el Schalke 04 alemán y este año se pasó una buena temporada en el dique seco por culpa de una lesión, se ha recuperado justo a tiempo para la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018.
La hinchada suiza celebra la presencia de Embolo desde hace ya años, independientemente de si el ariete marca goles o de si juega siquiera. Y cuando el joven internacional esboza su radiante y característica sonrisa al término de un partido, uno se siente por un momento convencido de que las cosas van a salir bien, sin importar lo que haya pasado o lo que se avecine. “Es estupendo contar con una afición como la nuestra, que nos apoya en todo momento y nos da tantísimo. Eso es también lo que distingue a Suiza, esa energía positiva y esa cohesión. Tenemos que seguir así, porque solo si estamos juntos llegaremos lejos”, explica.
¿Le saldrán a Suiza las cosas tan bien en Rusia como para meterse en cuartos de final? Lo cierto es que el combinado helvético no ha ganado un partido en una ronda eliminatoria mundialista desde 1938, mientras que, en el lapso de tiempo transcurrido desde aquel año, Suecia ha alcanzado las semifinales en tres ocasiones. “Sí, Suecia es un gran equipo”, reconoce Embolo, cuyo protagonismo en la cita rusa ha sido limitado hasta la fecha, con 117 minutos jugados y ningún gol en su cuenta particular. “En cualquier caso, prepararemos el partido a conciencia. Haremos todo lo que esté en nuestra mano para lograr el pase a cuartos. En la Eurocopa de hace dos años caímos en octavos frente a Polonia y aprendimos la lección. El hecho de que en Rusia hayamos puntuado en dos partidos que empezamos perdiendo demuestra que estamos listos para más”, asegura.
Seis días separan el último partido de Suiza en la fase de grupos, contra Costa Rica, y el de octavos de final, y parece que Embolo ha aprovechado el tiempo en lo que a fortalecer el ánimo se refiere. Con el permiso del seleccionador Vladimir Petkovic, el delantero dejó Nizhni Nóvgorod para viajar a Suiza por unas horas y conocer a su hija recién nacida, que vino al mundo en la noche del jueves.
“Todo coincidió a la perfección. Fui directo del aeropuerto al hospital y llegué justo a tiempo. Estoy muy feliz. El nacimiento de Naliya es con diferencia lo mejor que me ha pasado en la vida. Ahora espero poder quedarme un tiempo más aquí en Rusia, porque queremos llegar lejos en este certamen”, declaró Embolo tras reincorporarse a la concentración de la escuadra helvética.
La siguiente parada para Suiza será San Petersburgo, donde se disputará el partido contra Suecia. ¿Y después? ¿Quizás Samara para medirse en cuartos de final a Inglaterra o Colombia? Lo que está claro es que la versión original de la canción de Embolo suena estupendamente en cualquier ciudad y estadio: “In der Schwiizer Nati, da ist der Breel daheim…”.